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El Gobierno nacional se encuentra en el proceso de vetar tres leyes recientemente aprobadas por el Congreso: el aumento a las jubilaciones, el regreso de la moratoria y la declaración de emergencia en discapacidad. Una vez que el Ejecutivo reciba las leyes, tendrá diez días hábiles para ejecutar los vetos.
La estrategia del Gobierno
El Gobierno busca dilatar los tiempos y aprovechar el receso invernal para intentar negociar con los gobernadores y evitar así sumar un nuevo veto en la antesala de las elecciones. La Casa Rosada confía en que el tiempo y la incertidumbre alineen a los gobernadores en su favor.
Los gobernadores en juego
Los gobernadores provinciales tienen un papel clave en esta historia. Algunos de ellos, como Alfredo Cornejo de Mendoza y Claudio Poggi de San Luis, aspiran a acordar con el Gobierno nacional. Otros, como Leandro Zdero de Chaco, ya han logrado acuerdos.
Proyectos en juego
Los proyectos impulsados por los gobernadores sobre el reparto de fondos a través de los ATN y la coparticipación de lo recaudado por el impuesto a los combustibles fueron girados a comisiones. La Comisión de Presupuesto y Hacienda, presidida por José Luis Espert, será la encargada de discutir estos proyectos.
La oposición busca forzar el tratamiento
La oposición busca forzar el tratamiento de los proyectos y evitar que el Gobierno los vete. Para ello, necesitan reunir 129 votos para emplazar las iniciativas a comisión y acelerar su discusión. La próxima sesión podría ser clave para definir el futuro de estas leyes.
